Una buena opción para las vacaciones, es alquilar un coche con el que recorrer al completo y con total libertad el destino elegido. Esta modalidad también es cada vez más elegida por aquellos conductores que apuestan por el ‘renting’ o el ‘ leasing'. Así, el alquiler de un vehículo es una práctica en auge. Por ello, además de conocer las prestaciones especiales del vehículo para manejarlo correctamente y el estado del seguro en estos casos, también hay que tener en cuenta qué ocurre con las multas en este tipo de contratos.
Muchas leyendas urbanas aseguran que la notificación de las infracciones cometidas con un coche de alquiler nunca va a llegar. Así lo confirma una encuesta realizada por MyTripCar, una web que compara ofertas de alquiler de coches. En este sondeo, el 38,9% de los conductores sostenía ese argumento, con la justificación de que la infracción se cometió en otro municipio o país o porque creen que la notificación la recibirá la empresa de alquiler y será quien la asuma. Otras excusas empleadas para protegerse de la sanción económica que se deducen del estudio son el no conocer la zona por la que se conduce y el no tener claras las normas de tráfico, algo que comparten con los conductores nóveles. Solo un 15,8% reconocen que han conducido de forma más despreocupada con el coche de alquiler.
Si la multa es en España, la DGT informa a la compañía de alquiler del vehículo multado y, esta, a su vez, remite a tráfico la información del conductor que en ese momento tenía el coche. Algo parecido ocurre si la infracción se comete en la Unión Europea gracias al Registro de Vehículos de cada estado, al que todos los países miembros tienen acceso. Por esto, el arrendador cobrará un gasto de gestión por el trámite de informar a la DGT. La media de este gasto es de unos 40 euros, cifra que varía según la compañía. Es habitual que las compañías incluyan un apartado en el contrato del coche de alquiler destinado a las multas, lo que no exime del pago de infracciones posteriores. Porque la multa la tendrá que pagar le conductor. Sí que es habitual que se trate de procesos más lentos, pues la identificación del conductor los ralentiza, algo que no permitirá al infractor beneficiarse de las bonificaciones por pronto pago.
Muchas leyendas urbanas aseguran que la notificación de las infracciones cometidas con un coche de alquiler nunca va a llegar. Así lo confirma una encuesta realizada por MyTripCar, una web que compara ofertas de alquiler de coches. En este sondeo, el 38,9% de los conductores sostenía ese argumento, con la justificación de que la infracción se cometió en otro municipio o país o porque creen que la notificación la recibirá la empresa de alquiler y será quien la asuma. Otras excusas empleadas para protegerse de la sanción económica que se deducen del estudio son el no conocer la zona por la que se conduce y el no tener claras las normas de tráfico, algo que comparten con los conductores nóveles. Solo un 15,8% reconocen que han conducido de forma más despreocupada con el coche de alquiler.
Pero, ¿cuáles son las multas más frecuentes?
El 65% de los conductores que han alquilado un coche en los últimos meses aseguran haber cometido alguna infracción, pero ¿cuáles son las más comunes? De las 2.500 multas analizadas, el estacionamiento indebido en zona ORA ocupa el primer puesto siendo el motivo del 41,2% de las notificaciones. Le sigue el exceso de velocidad con un 13% y saltarse una prohibición con un 10,8%. El ranking se completa con el estacionamiento en zona de líneas amarillas (9,3%); el estacionamiento en acera o paso de peatones (7%); estacionar en carga y descarga (5,7%); saltarse una línea continua (3,4%); usar el móvil (2,6%); saltarse un semáforo en rojo (1,1%); otras infracciones (5,9%).Entonces, ¿quién la paga?
Si la multa es en España, la DGT informa a la compañía de alquiler del vehículo multado y, esta, a su vez, remite a tráfico la información del conductor que en ese momento tenía el coche. Algo parecido ocurre si la infracción se comete en la Unión Europea gracias al Registro de Vehículos de cada estado, al que todos los países miembros tienen acceso. Por esto, el arrendador cobrará un gasto de gestión por el trámite de informar a la DGT. La media de este gasto es de unos 40 euros, cifra que varía según la compañía. Es habitual que las compañías incluyan un apartado en el contrato del coche de alquiler destinado a las multas, lo que no exime del pago de infracciones posteriores. Porque la multa la tendrá que pagar le conductor. Sí que es habitual que se trate de procesos más lentos, pues la identificación del conductor los ralentiza, algo que no permitirá al infractor beneficiarse de las bonificaciones por pronto pago.
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